En una decisión sin precedentes, el presidente Nicolás Maduro ha presentado un recurso contencioso electoral  ante la Sala Electoral del Tribunal Supremo de Justicia de Venezuela. En medio de lo que él calificó como un golpe de Estado en marcha y un ataque directo al proceso electoral. 

El Jefe de Estado, acompañado por altos funcionarios del gobierno y del poder legislativo, ha expresado su total disposición a colaborar con las autoridades judiciales. En un gesto de transparencia, anunció que el PSUV presentará todas las actas electorales disponibles.

Durante su intervención, el mandatario hizo hincapié en su experiencia como constituyente en 1999, destacando su profundo conocimiento de las leyes y la Constitución. 

Asimismo, denunció una reunión en la Casa Blanca donde afirma que se planearon sanciones y acciones armadas contra Venezuela por parte de miembros de la oposición. Frente a lo que él describe como una intensa "guerra psicológica en redes y medios", dijo el Presidente. 

El mandatario nacional  instó a la Sala Electoral a convocar a todas las partes involucradas para examinar pruebas y certificar los resultados de las elecciones más recientes.

El presidente Nicolás Maduro se ofreció voluntariamente a ser interrogado e investigado personalmente, subrayando su disposición a someterse a la justicia en calidad de candidato ganador de las elecciones. 

Además, aseguró que tanto él como su partido están preparados para presentar el 100% de las actas en su posesión, desafiando a otros candidatos y partidos a hacer lo mismo.